El puente Eten - Monsefu tiene fallas en su estructura

Los habitantes de Ciudad Eten han empezado a encomendarse al Divino Niño de El Milagro, su patrono. Los paisanos del presidente del Consejo de Ministros, Javier Velásquez Quesquén, están seguros de que solo un milagro podrá evitar lo que los expertos pronostican, con respecto al futuro del puente que une los distritos de Eten y Monsefú.
Luis Reyes Carrasco, experto en hidráulica, considera que la obra, valorizada en S/.11 millones, se ejecutó sin ningún estudio serio de hidráulica fluvial porque la ubicación de la estructura es inconveniente respecto al flujo principal del río Reque.
Según Reyes Carrasco, el puente de 152 metros de longitud fue construido donde el lecho del río es demasiado ancho (492 metros), lo cual podría ser un peligro en caso de que se presente una avenida de más de 2.000 metros cúbicos por segundo. La obra fue edificada para que por debajo de ella discurran solo mil metros cúbicos por segundo.
Advertencias más graves ha formulado el presidente de la Comisión de Medio Ambiente del Colegio de Ingenieros de Lambayeque, Miguel García Puémape. Para el especialista, el puente Eten presenta un diseño que sería un peligro para los conductores. “Nuestra principal objeción es que el diseño geométrico de la estructura no conviene a la realidad topográfica e hidráulica del sector donde se ubica el puente”, declaró.
“Luego de revisar los planos, hemos detectado que el puente presenta una curvatura innecesaria de 2,68 metros hacia arriba, con respecto a la línea horizontal de los pilares principales, ubicados a los extremos del puente. De acuerdo con la firma del autor del diseño, el ingeniero Pedro Láinez Lozada, los planos, que forman parte del expediente técnico, fueron concluidos el 10 de febrero del 2009 y un mes después se iniciaron las obras sobre el río Reque. Dado el poco tiempo, se presume que la licitación de la obra se había llevado a cabo sin el expediente técnico terminado”, comentó García.
El responsable del consorcio Incot que ejecuta la obra, Guillermo Vélez de Villa, explicó que se trata de un diseño bien concebido. “La curvatura hacia arriba es algo muy moderno, y es para que los alcaldes de Monsefú y Eten no se puedan ver”, ironizó.
El alcalde de Ciudad Eten, Alejandro Ñiquen Sandoval, señaló que las críticas al puente son inoportunas porque la obra ya está casi concluida. “En su momento, los expertos debieron cuestionar los trabajos para corregirlos. Sin embargo, ni el Colegio de Ingenieros ni Luis Reyes Carrasco presentaron algo por escrito”, anotó el burgomaestre.
Fuente: Diario "El Comercio"