La singular historia de un efectivo policial con más de treinta años de servicio y que dentro de esa coraza e imagen de guardián del orden, escondía el potencial de un prometedor talento para la pintura y las artes, hasta llegar a convertirse ahora en un profesor y sub director de la escuela Bellas Artes de Piura.
Félix Flores Chafloque, natural de Monsefú, es un ejemplo viviente de lo que el arte y la pintura puede moldear.
Ël viene exhibiendo sus cuadros en la exposición pictórica que se realiza hasta el jueves en el templo Nuestra Señora del Rosario del asentamiento San Martín a invitación del padre Juan Rebolledo Herrera Muchos de sus cuadros llaman la atención por la utilización de la técnica del "puntillismo", el cual consite en una yuxtaposición de los colores unos sobre otros(al costado) para crear una visión óptica ilusoria y obtener de esta manera colores ópticos generados por la misma yuxtaposición.
También usa, la técnica del tipo "mosaico", por la cual cambia el lapicero, no con pintura, sino con fascícula geométrica que dan la sensación de movimiento, pues el efecto que se busca es que dé movimiento.
Félix Flores nos cuenta que dio una conferencia en el Club Grau, hace poco sobre Ignacio Merino, el gran pintor piurano, del cual conoce mucho gracias a que llegó a descubrir un manuscrito de un contemporáneo del pintor entre los archivos de ERBA que lo motivó a ser un estudioso de él.
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